Abilio Salanova

Abilio Salanova entre sus piezas en la nueva sala Galerías Aurora

La pintura de Salanova juega con la retina del observador. En «Percepción, materia y energía» importa la mirada, los movimientos de la retina, nunca estática, y las direcciones a las que da prioridad. El joven artista Abilio Salanova consigue tridimensionalidad en un espacio bidimensional, es decir, el cuadro.

Hasta quince encontrará el visitante en la exposición inaugurada en la nueva sala Galerías Aurora. En este espacio, las sugerentes formas protagonistas de las piezas de Salanova conviven con la venta de artesanía y vintage, envueltos en la tertulia del café-bar de esta sala organizada en nueve espacios abiertos a la visita del público.

D Abilio Salanova, nacido en 1975 en Minas de Río Tinto y adoptado por Nerva, estableció su residencia en Sevilla hace quince años. Pintaba desde niño y pronto se dejó enredar por el cómic. Se licenció en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla.

Inicialmente figurativo y dedicado al dibujo, se decantó por la pintura abstracta «buscando darle identidad propia a mis piezas. Intento aportar algo nuevo al panorama artístico partiendo de un proceso pictórico personal, un lenguaje visual que se pueda identificar conmigo mismo». Al pintar, prefiere no pensar la composición previamente, «sí las tonalidades y direcciones, pero voy componiendo a medida que me aventuro en el proceso, acumulando capas de pintura que van creando una forma que se va a perder fuera de los márgenes del espacio pictórico, que puede continuar».

Para ello cuenta con la participación del observador: «Espero que ponga de su parte. Prefiero invitarle a la reflexión». De ahí su predilección por la pintura abstracta que ahora exhibe, donde utiliza la curva y la diagonal para crear movimiento, buscando una sensación de tridimensionalidad. Para ello, aprovecha las «microsacadas» o movimientos involuntarios de la retina: «Hay un mapa de nuestro sentido visual marcado por las direcciones que sigue nuestra retina al mirar», comenta. Esta idea está relacionada con el título de la exposición, «Percepción, energía y materia»: «Por esas “microsacadas”, forma y fondo interaccionan como materia y energía. Es ahí donde influye la percepción del observador». Salanova pretende «integrar estos conceptos en un mismo espacio y acercarlo a mi forma natural de pintar».

Aunque use diferentes tonalidades según la pieza, el pintor plantea un primer color a partir del cual se expande el proceso, de manera que en la siguiente capa añade el complementario, seguido de un color neutro, su complementario y así sucesivamente: «Creo una tridimensionalidad a base de planos sobre un fondo», explica. Durante un mes, expone en Conde de Torrejón tras hacerlo en diferentes museos y galerías de Madrid, Huelva y Sevilla.

Via: Abilio Salanova